martes, 24 de junio de 2008

Ahora... que no.

Después de tenerme en ascuas, esperando para que me dieran el sí sobre el puesto que iban a crear para mí, me anuncian que no, que no pueden crearlo y que mi única opción es quedarme como jefe de proyectos, cobrando solo un poquito más. No me lo puedo creer. Ya había dicho que no a eso; había dicho que no quedarme haciendo lo que ya he hecho durante año y medio. Era mi momento para cambiar el rumbo de mi vida a algo mejor, algo realmente mejor y que me aportase felicidad y realización personal.
Les dije que no me bastaba, y me dijeron que era lo mejor que podía hacer ya que, una vez dentro y cuando Tomb Raider acabase, podrían crear el rol para mí. Y también me dijeron que si en noviembre, después de acabar con Tomb Raider, no podían crear el rol que me decían, entonces me podría ir libremente... Un momento... Aquí hay gato encerrado...
Eso de que parezca todo tan bonito y de que no me puedan prometer nada y que encima recalquen que, en noviembre me podía ir libremente me suena a «aprovechamiento» de la situación. Sé que me necesitan y ellos saben que lo sé, pero intentarme convencer para que me quede diciéndome que lo mismo pueden crear algo a mí pero que no me pueden prometer nada no me suena nada bien. Llevan un año sin poderme prometer si me iban a ascender o no. Tal vez, después de tanto tiempo haciendo promesas que no cumplen ya no creo en nada. Porque, al fin y al cabo, los que tienen la última palabra es Recursos Humanos, y son precisamente ellos los que no han creado ninguna oportunidad para mí durante todo este tiempo. ¿Quién me asegura que va a ser diferente esta vez?
Así que le dije a Caroline que podía empezar a preparar mi carta de cesión y mi dinero.
Y me siento mucho más tranquila.

No hay comentarios:

Publicar un comentario