miércoles, 5 de noviembre de 2008

I had a dream... that has come true...

Si Martin Luther King estuviese vivo, tal vez habría podido decir esa frase. Aunque, bueno, si él estuviese vivo, tal vez habría sido él el primer Presidente de raza negra de Estados Unidos (o, mejor dicho, el primer presidente que no es de raza pura blanca). Y es que, por fin, lo que el resto del mundo cree correcto es lo mismo que la mayoría de los ciudadanos estadounidenses.

Me he despertado esta mañana con la buena noticia de que Barack Obama había ganadp las elecciones (bueno, que había arrasado, decían algunos). Y aunque no viva en EE. UU. me alegro por el mundo. Me alegro por el mundo y por los ciudadanos de EE. UU. que nunca habían tenido la oportunidad de conseguir el cambio, de conseguir alguien que, al menos en aparencia, es menos corrupto que el resto, alguien que tanto se parecía a ese Kennedy que anunciaba el cambio en EE. UU. Y de verdad espero que todo salga como parece, que Barack cumpla su promesa y haga lo que anunció. Y no solo eso, también espero es que el resto del mundo siga el ejemplo: que dejen de mirar a la gente por su exterior y la gente empiece a ver en el interior de la gente. Da igual cuál sea tu raza o si eres hombre o mujer: todo el mundo es capaz de conseguir lo que se merece. Y más aún si eso significa hacer algo por ayudar al mundo.

Me quedé pensando durante un rato, pensando si en España pasaría algo así pronto. Un país que lleva abierto al mundo solo apenas 35 años, en el que la mujer cada vez tiene un papel más importante, en el que, por fin, vemos casi tantas mujeres políticas como hombres... Me pregunto si España conseguirá algo parecido, si el español podrá fijarse solo en lo que un candidato a la presidencia es capaz de hacer, sin darle importancia a si es hombre o mujer o gay o de qué raza es. Me gustaría poder ver que en España se ha acabado el racismo y el machismo, que la gente por fin actúa como personas y no con prejuicios inculcados con tantos años de represión. Porque creo que ya va siendo hora de ese cambio en España, de que desde fuera se nos mire mal porque un grupo de gilipollas creen que es gracioso meterse con un conductor de Fórmula 1, un jugador de fútbol o quién sea, únicamente porque tienen un color de piel diferente al suyo. ¿Será posbile que ese cambio ocurra algún día?

I have a dream... y espero que se haga realidad.

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